Limpieza de suelos hidráulicos
En Tratamientos Rustisur llevamos más de 20 años trabajando en la limpieza y tratamiento de todo tipo de suelos de barro, rústicos y porosos. Trabajamos con los productos más adecuados a cada tipo de pavimento para intentar ofrecer al cliente los mejores resultados. Todos los años hacemos pruebas con los nuevos productos que salen al mercado para la limpieza de suelos de barro, comparándolos con los ya existentes y con nuestros propios productos. El fin es determinar qué tratamiento es el más adecuado, duradero y, sobre todo, que respete el aspecto natural de los suelos rústicos.: barro, hidráulico, suelos porosos, etc.
LIMPIEZA Y TRATAMIENTOS DE SUELOS HIDRÁULICOS. Experiencia en la limpieza de suelos hidráulicos.
El suelo hidráulico es el resultado de fabricar baldosas de cemento comprimido con prensa hidráulica.
Los colores se consiguen mezclando polvo de mármol, arena, cemento blanco y pigmentos. Esta mezcla es la que va en la parte superior de la baldosa. Los colores y los dibujos son particulares de cada fabricante. La baldosa hidráulica es un material de gran resistencia y se puede poner tanto en interior como en exterior. Al ser un material poroso es conveniente darle un tratamiento después de su colocación. Los tratamientos que aplicamos en T. Rustisur, S.L. son para toda la vida, sólo se hacen una vez al principio, cuando se colocan las baldosas, y luego con un mantenimiento mínimo nos durarán toda la vida.
Casa Palacio Don Ramón
Tratamiento de suelos rústicos
Suelo hidráulico baño
Sevilla
Baldosín
Marbella
Mosaico Hidráulico
Sevilla
Restauración de suelo hidráulico antiguo
Málaga
Suelo Hidráulico interior
Marchena
.
|
Suelo hidráulico baño
Casa Sevilla
|
Baldosín
Marbella
Mosaico hidráulico
Sevilla
Restauración de suelo hidráulico antiguo
Málaga
Suelo hidráulico patio interior
Limpieza y tratamiento | Casa Marchena
Los suelos hidráulicos necesitan una limpieza muy cuidadosa debido a sus características, ya que si realizamos una limpieza muy agresiva podríamos deteriorar el color. Debemos tener en cuenta que no todos los hidráulicos son iguales.
Con vinagre
En primer lugar podemos utilizar un poco de vinagre mezclado con agua caliente (aproximadamente un vaso de vinagre en medio cubo de agua), mojaremos el suelo con la fregona y frotamos con un cepillo de cerdas duras, luego lo enjuagamos con un poco de agua limpia.
Salfumat (ácido clorhídrico).
El tercer limpiador para el suelo hidráulico que podemos utilizar es el salfumat. En esta ocasión hay que tener mucho cuidado porque este es un producto que si bien es de los más efectivos, también es de los más peligrosos, ya que podemos decolorar nuestro hidráulico si no lo utilizamos de la manera correcta. LLenamos el cubo de agua y le echaremos un vaso de salfumat, mojaremos una parte pequeña de nuestro suelo dándole varias pasadas con la fregona, notaremos cómo hace una espuma, esta es la reacción del ácido con las manchas de cemento que nos ha quedado de la lechada. Luego hay que enjuagarlo rápidamente con abundante agua limpia. Por supuesto, si las dimensiones del suelo son grandes recomendamos ponerse en manos de profesionales.
Con Bicarbonato
El segundo producto que podemos utilizar es el bicarbonato, que lo echaremos sobre las manchas, le echamos un poco de agua y frotamos con cepillo de raiz. A continuación lo enjuagaremos con agua limpia.
Con Legía.
No se debe utilizar lejía para la limpieza de este tipo de losas, ya que lo blanquean y matan los colores, dejándolos blanquecinos.
Si las manchas no salen, no dudes en llamarnos, nos pondremos en contacto con usted para solucionar el problema.
Antiguamente se limpiaba diariamente de rodillas con jabón y un estropajo de esparto, cosa que hoy en día es inviable, por eso la mejor solución es darle un tratamiento específico para suelos hidráulicos que penetra totalmente en la losa y la protege desde el interior, con esto conseguimos conservar todo el esplendor del suelo hidráulico y evitamos que se manche. El mantenimiento de los suelos hidráulicos tratados es muy sencillo, simplemente barrer, aspirar o pasarle la mopa y limpiarlo (cuando toque) con un jabón especial para suelos hidráulicos, que llevamos fabricando y utilizando desde hace años y que consigue que se conserven los suelos como el primer día.
El mosaico hidráulico necesita un tratamiento inicial con el fin de evitar las temidas manchas, ya que es un material poroso que absorbe las manchas con facilidad. Algunos fabricantes recomiendan sólo limpiarlo con jabón verde (el de toda la vida), en parte llevan razón, pero para evitar que se manche con este sistema necesitaríamos hace la limpieza que se hacía antiguamente, es decir, limpiar todos los días el suelo con jabón y frotando con estropajo de esparto hincados de rodillas.
Como este sistema no creo que lo utilice ya nadie actualmente, se hace necesario el darle un primer tratamiento al suelo de mosaico hidráulico para evitar las manchas; posteriormente este tratamiento se va gastando poco a poco y va entrando en su lugar el jabón especial para suelos de mosaico hidráulico, quedando todo nuestro suelo completamente protegido durante muchos muchos años.